sexta-feira, 10 de janeiro de 2014

BARBÁRIE NO CAMBOJA, VIOLAÇÃO DA LIBERDADE SINDICAL E DO EXERCÍCIO DEMOCRÁTICO DE GREVE.

                                                   Noticia
BARBÁRIE NO CAMBOJA, VIOLAÇÃO DA LIBERDADE SINDICAL E DO EXERCÍCIO DEMOCRÁTICO DE GREVE: Governo do Camboja reprime revista, matando trabalhadores com fiflex AK-47
El 3 de enero, 2014, el gobierno de Camboya envió policía militar para atacar una manifestación de trabajadores de textil en huelga. La policía abrió fuego con rifles de asalto AK-47 rifles, matando a cinco trabajadores y dejando heridos a docenas.
Desde entonces el gobierno ha prohibido cualquier manifestación y ha utilizado fuerza militar para mantener las calles abiertas. Por lo menos 39 trabajadores han sido detenidos y están presos en lugares desconocidos. Enfrentados con esta brutal represión, los sindicatos han decidido cancelar la huelga y los trabajadores están regresando al trabajo, aunque continúan exigiendo un aumento en el salario mínimo.
Ya no están en huelga – pero su lucha continúa y están pidiendo nuestra ayuda.
 
Leia mais.
Camboya: Alto a la violencia gubernamental contra trabajadores
http://www.labourstartcampaigns.net/images/industriall.gifhttp://www.labourstartcampaigns.net/images/ituc.pnghttp://www.uniglobalunion.org/sites/default/files/logo_global_union.pnghttp://www.labourstartcampaigns.net/images/clc.pnghttp://www.labourstartcampaigns.net/images/workersunited.png
En asociación con IndustriALL, UNI Global Union, la Confederación Sindical Internacional, la Confederación Laboral de Camboya, y Workers United.

http://www.labourstart.org/images/2129.jpgEsta campaña es en solidaridad con los trabajadores de textil de Camboya y sus sindicatos, que iniciaron una huelga general en busca de un aumento en el salario mínimo de US$80 (dólares) a US$160. La huelga fue muy efectiva, contando con la participación de muchos miles de trabajadores. La asociación de empleadores (GMAC) llamó por un cierre industrial e instó al gobierno a reprimir a los trabajadores. El 3 de enero, 2014, el gobierno envió policía militar para atacar a una manifestación en una de las fábricas en huelga, donde abrieron fuego contra los manifestantes con rifles de asalto AK-47, matando a cinco e hiriendo gravemente a docenas más. Desde entonces el gobierno ha prohibido cualquier manifestación y ha utilizado fuerza militar para mantener las calles abiertas. Por lo menos 39 trabajadores han sido detenidos y están presos en lugares desconocidos. Enfrentados con esta brutal represión, los sindicatos han decidido cancelar la huelga y los trabajadores están regresando al trabajo, aunque continúan presionando por sus demandas.

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