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Con Sandro Eduardo Sardá
En los frigoríficos, la carne de los trabajadores sufre
Mientras las transnacionales brasileras continúan engordando…
Foto: Sandro Sardá
Gerente Nacional del Proyecto de Adecuación de las Condiciones de Trabajo en los Frigoríficos del Ministerio Público del Trabajo, Sardá dialogó con La Rel sobre la aplicación de la Norma Reguladora 36 de la industria cárnica. Según dijo, las empresas se resisten a aplicarla, incluso las más grandes, que tienen cada vez mayores ganancias. Sardá llamó también a los sindicatos a aumentar su movilización para lograr que la NR 36 no sea sólo un papel
-¿Cuál es la evaluación que realiza el Ministerio Público del Trabajo (MPT) sobre la aplicación de la NR36, aprobada el pasado año?
-La sola aprobación de la NR 36 ya es algo altamente importante para la adecuación del ambiente laboral y la protección de la salud de los trabajadores del sector, sobre todo en lo que refiere a las pausas para reducir las enfermedades vinculadas a la fatiga y a los movimientos repetitivos.
Pero solo su aprobación no es suficiente, pues el ritmo de trabajo que viene siendo impuesto a los trabajadores del sector continúa generando una gran legión de enfermos, principalmente dolencias mentales y osteomusculares, lo que hace que sea urgente la aplicación de la NR36 en los hechos.
Es necesario e imperioso que se adecuen las condiciones ambientales en los frigoríficos, que se baje el ritmo de trabajo.
-¿Y qué está sucediendo?
-El MPT redactó una recomendación que pone un límite al ritmo de trabajo, que dispone que no se debe pasar de las 40 acciones técnicas por minuto, la necesidad de la reducción de la jornada laboral y el establecimiento de un servicio médico adecuado para los trabajadores.
Todavía continúa habiendo una decisión deliberada de las empresas de no proteger la salud de los trabajadores aún frente a innúmeros agentes de riesgo.
El MPT ve con preocupación, en recientes inspecciones realizadas en Rio Grande del Sur, que el 90 por ciento de los trabajadores trabajan soportando dolor permanente y que 75 por ciento utilizan analgésicos y antiinflamatorios, lo que demuestra que todavía existe una situación muy preocupante a la que el Ministerio debe atacar con más inspecciones y con medidas disciplinarias, pero es necesario que los trabajadores también estén en esta lucha.
Los sindicatos deben profundizar la lucha
-¿Crees que se estancó la movilización por la aplicación de la norma tras su aprobación?
-Luego de una intensa movilización de los sindicatos, no se ha mantenido esa energía. El ritmo de trabajo que impone la industria frigorífica es incompatible con la salud de los trabajadores.
En empresas como JBS, BRF y Tyson Foods las inspecciones que ha realizado el MPT arrojan que una mayoría importante de los trabajadores desarrollan sus tareas con dolor. Por lo tanto en estas empresas no se está aplicando la nueva normativa.
Lamentablemente, Brasil continúa generando una legión de jóvenes lesionados aun después de la aprobación de laNR36. Continuamos siendo la China del sector avícola y el costo social de esto es muy alto.
Empresas ganan más y explotan más
-Es inadmisible, sobre todo porque estas grandes empresas vienen creciendo a un ritmo también muy alto, quedándose con una tajada grande de la torta del mercado cárnico.
-Totalmente. El mercado está concentrado en manos de unas pocas empresas, como JBS y BRF, cuyas ganancias líquidas giran en torno a 1.000 millones de reales al año (unos 455 mil millones de dólares), lo que les posibilitaría, sin dudas, tomar medidas preventivas respecto a la salud de sus empleados.
De estos hechos se desprende mi declaración de que hay una intencionalidad de las empresas en no cuidar de la salud y el bienestar de sus trabajadores. Lo que evidentemente configura un dumping social.
-Tampoco se puede admitir el mantenimiento del banco de horas…
-Por supuesto. Es además un sistema inconstitucional. En actividades productivas a gran escala que generan riesgos a la salud de los trabajadores, como lo es la tarea en el sector frigorífico, es inaceptable que los sindicatos pacten bancos de horas.
En este sentido el MPT promulgó una recomendación para que las organizaciones sindicales no acepten ese sistema al igual que recomienda que los trabajadores no realicen más de 40 movimientos por minuto. Para ello es necesario que los dirigentes sindicales actúen en concordancia, fiscalizando el cumplimiento de la NR36.
-Parece que la UITA debe retomar la campaña internacional contra el ritmo frenético en los frigoríficos de Brasil…
-Sin dudas el papel de la UITA en todo lo que refiere a defensa de los derechos humanos y de los trabajadores es gravitante a todo nivel, no solo en Brasil sino alrededor del mundo.
Es necesario que la UITA sea el canal para que el resto del planeta sepa que en Brasil a pesar de que fue aprobada una normativa que protege la salud de los trabajadores ante la avaricia del capital, persisten problemas y siguen surgiendo legiones de lesionados. Es imperioso que los consumidores de los productos de estas empresas sepan que estos son producidos a costa del sufrimiento humano.
El MPT también está proclamando la reducción de la jornada laboral para 40 horas semanales. Brasil ya está en condiciones económicas de hacerlo, lo que traería aparejado beneficios no solo para los trabajadores sino para el país en su totalidad.
Cabe recordar que Brasil gasta casi el 4 por ciento de su PIB en atender enfermedades ocupacionales y que ocupa un triste cuarto puesto mundial en accidentes de trabajo fatales.
Leia mais.
Investigação realizada pela Repórter Brasil aponta os problemas à saúde e segurança dos empregados das principais indústrias de carnes do país
Repórter Brasil | Categoria(s): Notícias
A rotina dos trabalhadores da indústria de abate de aves, suínos e bovinos envolve inúmeros riscos devido ao manuseio de instrumentos cortantes, a pressão por altíssima produtividade e, não raro, jornadas exaustivas em ambientes frios e insalubres.
Produzida pela Repórter Brasil, a investigação Moendo Gente (www.moendogente.org.br) mostra os maiores problemas da indústria dos frigoríficos, um dos principais setores do agronegócio nacional. Atualmente, emprega mais de 750 mil pessoas e, em 2011, chegou a exportar o equivalente a US$ 15,64 bilhões em carnes.
O Moendo Gente relata problemas em 24 plantas frigoríficas pertencentes às três principais empresas que abastecem nossos supermercados e fazem do país o líder mundial na exportação de proteína animal: JBS, Marfrig e Brasil Foods.
Em 2011, a Repórter Brasil lançou um documentário mostrando o retrato do trabalho em frigoríficos, Carne, Osso. Clique aqui para assistir ao trailer do filme
Problemas de saúde
Na unidade de Rio Verde (GO) da Brasil Foods, segundo levantamento do Ministério Público do Trabalho (MPT), cerca de 90 mil pedidos de afastamento foram registrados entre janeiro de 2009 e setembro de 2011. É como se a cada 10 meses todos os 8 mil empregados do frigorífico tivessem que se ausentar por ao menos uma vez devido a problemas de saúde relacionados ao trabalho.
Os afastamentos por distúrbios osteomusculares (os chamados DORT) foram os mais recorrentes – uma média altíssima de 28 atestados por dia, ou 842 por mês.
Já na unidade de Barretos (SP) da JBS, 14% dos aproximadamente 1.850 funcionários estão permanentemente afastados do trabalho devido a acidentes e doenças ocupacionais e sobrevivem com o benefício pago pelo Instituto Nacional do Seguro Social (INSS). Só no primeiro semestre de 2011, registraram-se 496 pedidos de afastamento temporário (com menos de 15 dias) por conta de distúrbios psíquicos e problemas esquelético-musculares.
Em 2011, a Seara (empresa do grupo Marfrig) foi condenada a pagar uma indenização de R$ 14,6 milhões por danos morais coletivos causados aos trabalhadores na unidade de Forquilhinha (SC). A Justiça determinou também que a Seara conceda pausas para “recuperação térmica” de 20 minutos a cada 1 hora e 40 minutos de trabalho. A mesma sentença obriga ainda o frigorífico a liberar a ida dos trabalhadores ao banheiro, sem que seja necessária autorização prévia de um superior.
Atividade de alto risco
Uma das características do trabalho em frigoríficos é a elevada carga de movimentos repetitivos. Trabalhadores das indústrias de aves desossam, no mínimo, 4 coxas de frangos por minuto. Nessa função, há funcionários que realizam até 120 movimentos diferentes em apenas 60 segundos, enquanto estudos ergonômicos apontam que o limite de ações por minuto deve ficar na faixa de 25 a 33 movimentos por minuto para evitar o aparecimento de doenças osteomusculares.
Fiscalizações feitas pelo Ministério do Trabalho e Emprego (MTE) e pelo Ministério Público do Trabalho (MPT) vêm constatando prolongamento irregular da jornada de trabalho, com expedientes que chegam a superar 15 horas diárias.
Especialistas em saúde do trabalho afirmam que as lesões por esforços repetitivos têm como um dos fatores facilitadores e agravantes a exposição a baixas temperaturas. Além disso, o trabalho contínuo com facas, serras e outras ferramentas afiadas, aliado a jornadas exaustivas, elevam o risco de acidentes da atividade.
Órgãos governamentais e autoridades competentes estão cientes dos riscos que o trabalho em frigoríficos gera à saúde de seus empregados. Segundo dados oficiais do Ministério da Previdência Social (MPS), quando se comparam os problemas de saúde gerados especificamente pelo abate e processamento de carne com os danos provocados por todos os demais segmentos econômicos brasileiros, o resultado da matemática é assustador.
No abate de bovinos, ocorrem duas vezes mais traumatismos de cabeças e três vezes mais traumatismos de abdômen, ombro e braço que em outras atividades. O risco de sofrer uma queimadura é seis vezes superior.
No abate de aves, a chance de um trabalhador desenvolver um transtorno de humor, como uma depressão, é 3,41 vezes maior. No abate de aves e suínos, o risco de sofrer uma lesão no punho ou nos plexos nervosos do braço é 743% maior.
Baixas indenizações
Funcionários de frigoríficos que se acidentam gravemente ou desenvolvem doenças ocupacionais têm sido contemplados pela Justiça com indenizações por danos morais comparáveis às recebidas por cidadãos que tiveram seus nomes inseridos indevidamente no cadastro de “maus pagadores” da Serasa Experian.
Para especialistas da área, as condenações impostas pelo Poder Judiciário aos frigoríficos resultam em indenizações de valor muito baixo que, em vez de inibir as práticas nocivas no setor, acabam permitindo que novos acidentes ocorram.
Em Goiás, por exemplo, um trabalhador de uma planta industrial da Marfrig teve de ser submetido a uma cirurgia depois que um corte profundo em seu braço esquerdo atingiu nervos e tendões, prejudicando a mobilidade de sua mão. Por não fornecer os devidos Equipamentos de Proteção Individual (EPIs), o frigorífico foi condenado a arcar com os custos da cirurgia e a pagar uma indenização de R$ 5 mil por danos morais ao empregado.
Também em Goiás, uma cliente processou um banco que levou seu nome à Serasa Experian e foi contemplada com uma indenização de R$ 10 mil por danos morais.
Legislação específica para o setor
A legislação trabalhista do Brasil já prevê uma série de medidas que, se devidamente aplicadas, contribuiriam para a proteção da saúde dos empregados do setor de frigoríficos. O artigo 253 da Consolidação das Leis do Trabalho (CLT), por exemplo, determina a realização de intervalos de 20 minutos a cada 1 hora e 40 minutos de trabalho para amenizar os efeitos do frio.Há normas semelhantes para mitigar os problemas gerados pelos movimentos repetitivos. Só que as empresas nem sempre cumprem essas determinações e, por essa razão, vêm sendo acionadas judicialmente pelo Ministério Público do Trabalho (MPT).
Desde 2010, a Secretaria Nacional de Inspeção do Trabalho do Ministério do Trabalho e Emprego (SIT/MTE) vem debatendo com representantes de empresas, trabalhadores e órgãos competentes (como o Ministéri Público do Trabalho) o texto de uma Norma Regulamentadora (NR) que vai disciplinar o trabalho em frigoríficos.
Se aprovada, a NR fornecerá detalhes sobre o fornecimento de Equipamentos de Proteção Individual (EPIs) aos trabalhadores; a adequação dos postos de trabalho, levando em conta os instrumentos (facas, serras)e o mobiliário (mesas, esteiras); a velocidade e o ritmo de trabalho, e a concessão de pausas aos empregados. Esse último ponto é o que tem sido objeto de mais controvérsias nas discussões sobre a nova NR, que pode ser aprovada ainda em 2012.
Mercado global: o que pensa quem consome a carne brasileira
Atualmente, a carne brasileira é vendida em mais de 150 países. Apesar dos graves problemas trabalhistas em suas fábricas, Brasil Foods, JBS e Marfrig se valem de parcerias com gigantes do varejo para escoar seus produtos no Brasil e no exterior.
A Repórter Brasil investigou ainda os elos que ligam esses três grupos frigoríficos às maiores redes mundiais de fast-food (McDonald’s, Subway, Burger King, KFC e Pizza Hut) e aos dez maiores varejistas globais com atuação no setor alimentício (Walmart, Carrefour, Tesco, Metro, Kroger, Lidl, Costco, Walgreens, Aldi e Target).
A unidade de Naviraí (MS) da JBS é uma das plantas industriais da empresa que abastecem lojas brasileiras do Walmart. Registros de desmaios e queixas de mal-estar entre trabalhadores levaram o Ministério Público do Trabalho (MPT) a ajuizar um pedido de interdição do setor de abate local, em novembro de 2010.
No Oriente Médio, o Carrefour comercializa carne halal (preparada de acordo com os preceitos islâmicos do Alcorão), proveniente da unidade de Dois Vizinhos (PR) da Brasil Foods (BRF). Em 2011, a Justiça do Trabalho condenou a BRF por terceirização ilícita e por submeter a “condições absolutamente indignas” os trabalhadores muçulmanos empregados localmente na produção desse tipo de item.
A unidade da Marfrig em Hulha Negra (RS) é responsável pela fabricação de carnes enlatadas “marca própria” da Tesco, o maior varejista do Reino Unido. Uma inspeção do Ministério Público do Trabalho (MPT), realizada em dezembro de 2011, constatou que 12% dos empregados locais estavam afastados por acidentes ou doenças ocupacionais.
Todos os varejistas e redes de fast-food foram convidados a se manifestar sobre os problemas identificados em operações de seus fornecedores. O Moendo Gente traz as respostas daqueles que optaram por se posicionar.
9 comentários
1. 
Nanci Gardim disse:
Acredito que temos que repensar muitos dos aspectos que envolvem as condições dos trabalhadores nas empresas, inclusive os de "saúde mental". Convido vocês para participarem da próxima “Manhã da Inovação” (projeto apoiado pelo CNPq), que acontecerá no dia 19 de setembro/2012, no auditório do CTI , em Campinas.
O tema dessa edição será "TRABALHO E SAÚDE MENTAL: IMPACTOS DE FATORES PSICOSSOCIAIS NA INOVAÇÃO". O evento é uma realização do CTI (por meio do Projeto GAIA) em conjunto com a FUNDACENTRO.
Inscrições gratuitas: https://docs.google.com/spreadsheet/viewform?formkey=dGZnZ3FSSVA3U0dXTTRJd0ZMelNYZkE6MA#gid=0
OBS: Dificuldades para se inscrever, favor contatar gaia@cti.gov.br
OBS: Dificuldades para se inscrever, favor contatar gaia@cti.gov.br
2. Ivan disse:
Olá. Sou auditor de responsabilidade social e sociólogo, e já auditei alguns frigoríficos. Neste momento estou em um deles, na cidade de Cuiabá. Na minha pausa noturna, no hotel, tomei contato com as informações do site. A iniciativa de vocês são fundamentais para difundir um conteúdo de informação fundamental para uma o entendimento crítico da indústria de alimentos industrializados do país. Para mim, as piores condições de trabalho são as mais alienantes. Para ser alienante o trabalho não deve permitir devaneiros, elocubrações, imaginações. O tempo corrido da linha mata a graça de viver. Por isso o semblante triste e a resignação bovina em aceitar sem revoltar-se, sem mudar a situação.
3. Zé Total disse:
O trabalho exige total concentração da personalidade e da inteligência de quem trabalha. Quando a energia e o investimento pessoal aplicados ao trabalho não são reconhecidos, gera-se sofrimento mental. O reconhecimento não é uma reivindicação secundária dos que trabalham. Ao contrário, mostra-se decisivo na dinâmica de mobilização subjetiva da inteligência e da personalidade no trabalho (motivação).O reconhecimento do trabalho pode ser reconduzido pelo sujeito ao plano da construção de sua identidade. Pelo sentimento de alívio, de prazer ou até de elevação, o trabalho se inscreve na dinâmica da realização de ego.
4. Reijane Pinheiro da Silva disse:
Parabéns pelo trabalho. Defendi uma tese de doutorado sobre imigrantes goianos na República da Irlanda. O processo de imigração teve inicio com a contratação de goianos para frigoríficos irlandeses. Conheci muitos deles na Irlanda com lesões graves, acidentados e com demandas trabalhistas com os frigoríficos de lá. As leis trabalhistas irlandesas não protegem os estrangeiros, mesmo contratados, da mesma maneira que protegem os nacionais.
PARABENS PELA INICIATIVA DE VOCES o bRASIL AINDA É TERCEIRO MUNDISTA EM RELAÇAO AO DIREITO DOS TRABALHADORES, MAS ENQUANTO HOUVER POLITICAS DA LINHAGEM QUE ESTÁ EM BRASÍLIA NADA MUDARÁ.
[...] desmonte de esquema 2011: Frigorífico é condenado em R$ 16 mi por problemas trabalhistas 2012: “Moendo Gente” mostra as condições de trabalho nos frigoríficos do Brasil 2012: Da vigilância à prevenção, como diminuir acidentes de trabalho 2013: Escravo, nem pensar! [...]
[...] desmonte de esquema 2011: Frigorífico é condenado em R$ 16 mi por problemas trabalhistas 2012: “Moendo Gente” mostra as condições de trabalho nos frigoríficos do Brasil 2012: Da vigilância à prevenção, como diminuir acidentes de trabalho 2013: Escravo, nem pensar! [...]
9. jean judson disse:
Ola, trabalho em uma industria de aves em Barbacena-MG, Rivelli, pesquise sobre ela faco um relatorio como trabalha esta empresa. Desde ja agradeco.
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